No te vayas
Otra de Milán, esta vez en un entorno tan street como el metro.
Esta foto puede convertirse en una de mis favoritas. La expresión del hombre que estaba delante de mi, parecía pedir con la mirada a la señora que no se fuera, que se quedara con él.
Lejos de la realidad, el hombre estaba con la mirada perdida y no tenía ninguna relación con la señora que abandonaba el metro.